Por Dr Juan Ricardo Marquez
Una ostomía es una abertura quirúrgica en el abdomen en la cual el íleon (intestino delgado: ileostomía) o el colon (intestino grueso: colostomía) se extraen y se fijan a la superficie de la piel. La exteriorización del colon puede ocurrir en cualquier parte de su trayecto, pero la del íleon debe ser en su extremo más cercano posible al ciego que es la primera porción del colon.
El extremo del colon que se vuelve hacia la superficie de la piel se llama ostomía o estoma, una palabra griega que significa “abertura.”
El estoma que puede ser temporal o permanente se convierte en la salida de todas las evacuaciones y gases. El tener una ostomía no debe afectar su capacidad para comer y digerir los alimentos. Ya que no hay músculos alrededor del estoma, no podrá controlar cuándo sale la materia fecal de su cuerpo. Por lo tanto, se le adhiere a la piel una bolsa alrededor del estoma, a prueba de olores para recoger la materia fecal y los gases.
Es muy importante que la instrucción sobre los conceptos del manejo y cuidado de un estoma deben hacerse siempre en lo posible en presencia de un familiar del paciente o de una persona de confianza del paciente para que se comprometa a ayudarle a manejar la ostomía en la casa.
La función del estoma es una vez hecha la digestión llevar el material residual intestinal hacia afuera del cuerpo. Si es colostomía: la deposición va a ser formada.
Si es ileostomía la deposición casi siempre será diarreica o semiblanda.
Esto es una guía, pero recuerda que todos los organismos son diferentes, siempre consulta a tu médico.