por Dra. Viviana Parra Izquierdo
La EII controlada permite a las mujeres con esta enfermedad quedar embarazadas bajo condiciones similares que para el resto de la población. Pero habría que considerar que algunas cirugías o tratamientos pueden disminuir las posibilidades del embarazo.
En el caso de quedar embarazada con la enfermedad en remisión o controlada, las probabilidades de un brote son las mismas que tenía antes del embarazo; de hecho en algunos casos puede mejorar. Ahora bien, si se produce con la enfermedad activa el control es más difícil y puede durar toda la gestación.
La enfermedad activa es más peligrosa para el feto. Existe mayor riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer. Afortunadamente, la mayoría de los tratamientos para la EII son seguros y deben mantenerse durante el embarazo. Algunos de los fármacos que deben suspenderse antes del embarazo son el Metotrexato y la Talidomida.
El parto puede ser vaginal, a menos que el especialista considere que sea riesgoso. Una de las contraindicaciones de esta vía de parto es la enfermedad perianal grave en pacientes con Enfermedad de Crohn.
Entre las recomendaciones para mujeres con EII que quieran tener hijos son:
En cuanto a los hombres con EII que quieran tener hijos existen factores que pueden influir en la concepción, por ejemplo, las cirugías pélvica pueden producir impotencia y/o problemas de eyaculación. Algunos medicamentos pueden alterar la calidad del esperma y deben ser suspendidos tres meses antes.
Esto es una guía, pero recuerda que todos los organismos son diferentes, siempre consulta a tu médico.