Inmunomoduladores – Medicamentos en Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII)

Son medicamentos útiles para mantener en forma crónica la remisión tanto de la Colitis Ulcerativa como de la Enfermedad de Crohn. Los más frecuentemente utilizados son la azatioprina y la 6-mercaptopurina. Otros medicamentos que pertenecen a este grupo son la ciclosporina, el metrotexate y el tacrolimus.

Forma de administración: La azatioprina, la 6-mercaptopurina, el metrotexate y el tacrolimus se administran por vía oral. La ciclosporina se utiliza por vía endovenosa y oral.

Posibles efectos adversos: pueden causar dolor de cabeza, náuseas, vómito, dolor abdominal, malestar general, dolores articulares, fiebre, reacciones alérgicas, alteraciones en las células sanguíneas (anemia, disminución de los leucocitos), alteraciones hepáticas, hepatitis o pancreatitis aguda. Son medicamentos inmunosupresores, por lo tanto, también aumentan el riesgo de infecciones. Se ha asociado el uso crónico de azatioprina y 6 mercaptopurina, en forma extremadamente infrecuente, a la posibilidad de desarrollar linfomas (tumores de los ganglios linfáticos) o a cáncer de piel. Por estos motivos, los pacientes que reciben inmunomoduladores deben tener un control regular de cuadro hemático (recuento de las células sanguíneas) y de enzimas hepáticas, y usar medidas de protección contra la radiación ultravioleta (como por ejemplo el uso de protectores solares). La ciclosporina y el tacrolimus se han asociado a lesión renal, hipertensión, diabetes, aumento del nivel de colesterol sanguíneo, hipertensión arterial, dolor de cabeza y convulsiones. El metrotexate puede causar síntomas similares a la gripa, diarrea, ulceraciones en la boca, alteraciones de las células sanguíneas o alteraciones hepáticas. El metrotexate esta absolutamente contraindicado durante el embarazo.